Tercera entrega
Y como punto final os dejamos la tercera entrega de la exitosa saga. Disfruta ya de "El Cine: El Desafío Final".
¡Y el próximo miércoles el gran estreno de "El Cine 4"!
Capítulo 1: Accidente
Sofía estaba algo confusa tras haberse enfrentado al asesino blanco. Los tres tenían que conseguir capturarle, por lo que se dirigieron de nuevo al pueblo del cine.
-Está muerto-dijo Sofía.
-¿Cómo?-dijo Samuel.
-El asesino blanco está muerto-dijo Sofía-, su sangre es cuavulada.
-¿Entonces cómo vamos a matar a un muerto?-dijo Carmen.
-No lo sé-dijo Sofía.
En ese momento apareció el asesino blanco en mitad de la carretera. El coche le atropelló y dio varias vueltas de campana.
Momentos después, Sofía se despertaba y salía del coche.
-¿Estáis bien?-dijo Sofía.
-Yo sí-dijo Carmen-, pero…
-¿Qué?-dijo Sofía.
-Samuel está muerto-dijo Carmen.
-Joder-dijo Sofía-, tenemos que ir a la ciudad.
-Te suena el móvil-dijo Carmen.
-Diga-dijo Sofía-… ¡¿qué?!
-¿Qué ha ocurrido?-dijo Carmen.
-Patricia se ha fugado de la cárcel-dijo Sofía.
-¿La asesina del cine?-dijo Carmen.
-Exacto-dijo Sofía-, tenemos que regresar al pueblo, a mi pueblo.
Capítulo 2: La Fuga
Sofía y Carmen llegaron al pueblo a la comisaría para saber cómo se había fugado exactamente Patricia.
-¿Qué te han dicho?-dijo Carmen.
-Me han dicho que no se fugó ella-dijo Sofía-, alguien la liberó.
-¿Quién?-dijo Carmen.
-Eso es lo que me van a enseñar ahora-dijo Sofía-, están buscando el video de la cámara de seguridad.
-Señorita-dijo un policía-, ya lo hemos encontrado.
Todos se pusieron a ver el video de la celda de Patricia. Se pudo ver como un encapuchado se acercaba a la celda y la abría y se iba con ella. En un momento se pudo ver su rostro.
-¿Le reconoce?-dijo el policía.
-Sí-dijo Sofía-, es el asesino blanco.
Las dos salieron de la comisaría tras descubrir que el asesino blanco había liberado a Patricia.
-Esto es una locura-dijo Carmen-, el asesino blanco ha liberado a Patricia.
-Exacto-dijo Sofía.
-¿Por qué?-dijo Carmen.
-Está claro que tras luchar con él en la plaza del ayuntamiento-dijo Sofía-, ha visto que no puede matarme él solo.
-Entonces…-dijo Carmen.
-Ha ido a buscar ayuda-dijo Sofía-, la mejor que podía encontrar.
-¿Qué vamos a hacer?-dijo Carmen.
-Matar dos pájaros de un tiro-dijo Sofía.
Capítulo 3: El asesino blanco
Horas después
-¿Tienes lo que te he pedido?-dijo Sofía.
-Sí pero…-dijo Carmen.
-¿Qué?-dijo Sofía.
-Sofía no se si dará resultado-dijo Carmen.
-Al menos tenemos que intentarlo-dijo Sofía.
Las dos amigas se dirigieron a la plaza del ayuntamiento del pueblo, no el del asesino, el del cine. Allí prepararon la trampa y Sofía comenzó haciéndose un corte en el brazo.
En ese momento el asesino blanco apareció corriendo hacia Sofía, pero se giró y cogió a Carmen.
-¡Carmen!-dijo Sofía.
-¡Lo ha descubierto!-dijo Carmen.
-Voy a liberarte-dijo Sofía.
-¡No!-dijo Carmen-, lo otro es la única solución.
-Ni se te ocurra-dijo Sofía.
-Gracias por todo-dijo Carmen.
En ese momento Carmen accionó la trampa y comenzó a arder junto con el asesino blanco.
-¡Nooooo!-dijo Sofía.
Los dos quedaron carbonizados en el suelo. Sofía se acercó a su amiga y la vio muerta junto con el cadáver del asesino blanco.
-Hola Sofía-dijo Patricia-, volvemos a vernos.
Capítulo 4: El Desafío Final
Patricia había aparecido en la plaza del ayuntamiento. Sofía se giró y pudo ver de nuevo los ojos de la asesina de sus amigos.
-Ojala no hubiese visto de nuevo tu rostro-dijo Sofía.
-No lo volverás a ver-dijo Patricia-, en cuanto acabe de una vez contigo.
-Les mataste a todos-dijo Sofía-, ya no me queda nada.
-Entonces-dijo Patricia-, ¿por qué no te rindes?
-Porque aún tengo algo que hacer-dijo Sofía.
-¿El qué?-dijo Patricia.
-Acabar contigo-dijo Sofía.
En ese momento Sofía sacó su pistola pero Patricia fue más rápida y le pegó un disparo en el pecho.
Sofía cayó al suelo, estaba muy herida, y cada vez respiraba peor: se estaba muriendo. Pudo oír levemente como Patricia se acercaba a ella.
-Los buenos no tienen porque ganar siempre-dijo Patricia.
-Los malos nunca ganarán-dijo Sofía.
En ese momento Sofía cogió una rama de fuego del asesino blanco y se la echó encima a Patricia.
Sofía pudo ver como Patricia ardía y se moría, pudo ver su cadáver. Los ojos de Sofía se apagaban lentamente, su cuerpo se iba: había muerto.
En ese momento abrió los ojos y se encontraba en la sala de cine, donde todos sus amigos estaban allí.
Gonzalo, Javier, Samuel y Carmen la esperaban con un gran bol de palomitas. Ella sabía que estaba en el cielo pero estaba feliz al estar de nuevo con sus amigos.
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